BACH DE OCCULTA PHILOSOPHIA
Kuropaczewski, gracias por visitar el blog y en atención a tu petición, he de decirte lo imposible de encontrar en algún blog la descarga que buscas. Resulta que recientemente se reeditó un álbum en el que precisamente se expone la obra de J.S.Bach De Occulta Philosophia, interpretado en el laúd por José Miguel Moreno en el laúd, Emma Kirbby soprano y Carlos Mena contratenor. Existen varias empresas de venta por internet que te ofrecen el producto con un precio variable, una de ellas es la página cuyo link te envío
http://www.mdt.co.uk/MDTSite/pages/product/product.asp?ctgry=CD&prod=GCDP30107&cookie%5Ftest=1 (Hay más)
Y así como ese hay más; lamentablemente no lo tengo para subir al blog. Sólo pudiesen existir dos formas de lograrlo: 1.- Que alguna alma caritativa y bondadosa que lo tenga y que haya leído tu petición y la que ahora hago públicamente, nos lo comparta; para el efecto, puede hacerce por el mail
sankanab@gmail.com 2.- La otra forma de conseguirlo es por medio de la red emule, dónde existe en poder de un sólo usuario y vaya a saber dios si algún día tenga prendida su computadora y esté conectado a la red; por lo pronto yo ya lo hice y sólo a esperar como buen cazador o pescador que pacientemente espera que caiga la carnada en boca de la presa, así que unidos todos tal vez a alguien le caiga primero la descarga y entonces si a compartir. Por lo pronto aquí presento una reseña sobre tal obra y de su interesante contenido.
Tras los pasos del código de Bach
28-12-2006 03:06:31
POR RAMIRO VILLAPADIERNA
CORRESPONSAL
BERLIN. Es fina, es elegante, es poderosa, suena a cielo... Pero son números: «No unos cualquiera, sino combinaciones concretas de números», explica para referirse a la «Sonata en La menor», de Bach, una musicóloga alemana que dice haber descifrado, a través de una vieja técnica alfanumérica hebrea, la cábala de digitos que entraña la belleza de esa pieza, que ella titula ahora en un libro como «Pasión sin palabras».
«Bach y el acertijo del alfabeto numérico» se podría titular un nuevo superventas juvenil y, sin embargo, es lo que ha visto la experta Helga Thoene, de la universidad de Düsseldorf, aplicando las técnicas de decodificación de la «Gematría», disciplina de la cábala hebraica, ya empleada por seguidores del ocultista inglés Aleister Crowley para descifrar, entre otras cosas, el secreto de William Shakespeare. No es la primera. También Ruth Tatlow había planteado una adivinanza numérica tras los compases de ciertas partituras del músico universal de Eisenach.
Interlineado musical
Así parece que, con ayuda de la gematría, Bach habría añadido una especie de interlineado a su música. Las notas, según el sistema de notación inglés, son letras (A=la, B=si, C=do), y éstas son a la vez números, según la plantilla secreta de descifrado de esta rama de la cábala: de la A a la I va correlativa del 1 al 9, luego se complica con dos dígitos. Y «AS» (la bemol) sería A+S o 1+18 = 19. El propio nombre de Bach sería: 2+1+3+8 = 14. El nombre completo Johann Sebastian Bach es 58+86+14 = 158. Y éste es precisamente el número que suman las 15 notas del compás final de la «Fuga en Sol menor», una firma pues en notas y números. La profesora Thoene demuestra haber hallado igualmente el Credo y el Kyrie Eleision entreverados en la «Chaconne».
Cuando Bach escribió sus seis «Sonatas y Partitas para violin solo» (BWV1001 y BWV1004) contaba treinta años, estaba casado, tenía 7 hijos y se encontraba bajo el mecenazgo del conde de Coeten, pero entre las primeras y las segundas su mujer falleció. Las «Sonatas y Partitas» son consideradas conmovedoras obras de arte, tan musicalmente complejas como técnicamente exigentes, según los expertos, pero siempre han sido misteriosas: ¿Por qué un maestro de la polifonía creó su obra más personal para un solo instrumento, uno que sólo puede dar una nota a la vez?
El recurso empleado por Johann Sebastian Bach de infiltrar esquemas corales (cantus firmus) apenas detectables, con referencias religiosas, ¿busca sortear la ordenanza de su mecenas de escribir sólo música profana? Pese a la antipatía luterana por prácticas como la gematría, parece que Bach aplicó códigos como variantes cabalísticas cristianas, a partir de un latín simple, en lugar del sistema hebraico, donde el nombre de las letras son múltiplos de diez.
El ritual del significado de los números en el Renacimiento y Barroco se ha ido revelando a partir de modelos creados por los criptólogos William y Elizebeth Friedman, que establecen una diferencia fundamental entre números sueltos y pautas, las segundas con un importante potencial de significados. Hay números de un órden místico, como los perfectos, números cuadrados perfectos, complejos, primos, irracionales, números de un valor esotérico capaces de crear en la mente un orden alternativo de las cosas.
Mensaje escondido
También el disco «De Occulta Philosophia», con el laúd barroco de José Miguel Moreno, contiene las «Sonatas y Partitas», así como la «Chaconne-Tombeau», interpretada sobre las deducciones basadas en la gematría. La línea de voces de Emma Kirkby y Carlos Mena sobre la «Chaconne» sugiere un mensaje escondido que para la musicóloga alemana es «un monumento a la gemetría». Las «Sonatas y Partitas» se habrían creado según una sorprendente perfección numérica. Thoene cree revelar mensajes aún más profundos, de un genio capaz de seguir sorprendiendo siglos después hasta por encima de sus propias notas.
Bach habría obtenido números ricos de significado por medio de la combinación de notas de cada compás o sumando entre sí los compases. De tal modo que el total de todas las notas del primer compás de las 3 Sonatas y 3 Partitas (172, 350, 112, 85, 22 y 220) suma 961, que es el que suman las primeras tres líneas del credo, naturalmente en latín. Como el primer compás del Grave de la «Sonata en La menor» suma 112 como la palabra Christus, como la primera de la «Allemande» en la «Partita en Re menor», dice Maria Barbara, la mujer del compositor que acababa de fallecer, y la siguiente es el propio nombre del maestro. Según Thoene, «cada nota, su valor y relación con las otras está manipulado en una obra de arte tan precisa e inexplicablemente simple como bella y brillante».
Existe algún precedente, como el del violinista y director Christoph Poppen con los vocalistas de música antigua del Hilliard Ensemble, «Morimur», en el que también se busca demostrar el presunto empleo hasta el Barroco de técnicas numerológicas para escribir un sustrato de mensajes entre notas. Un lector de la revista «Classical Score» comentaba recientemente la escucha como «un efecto espectral», y otro de «Gramophone» sugiere que es «como estar dentro de la cabeza de Bach mientras concebía la obra». Los más escépticos sostienen que Bach ha tenido y tiene aún mucho que descubrir, sin necesidad de número alguno.
